Samsung Electronics promete darle seria batalla a su rival estadounidense Apple con el Galaxy S6 que será lanzado en 20 países. El smartphone insignia de la compañía surcoreana, que fue presentado el pasado 10 de abril, viene en dos modelos de perfil elegante y uno de ellos, el S6 Edge, con pantalla curva que ha enamorado a la crítica y los probadores de modelos beta.
Según el diario Nikkei, Samsung tiene muchas posibilidades con el S6. Si los clientes lo abrazan, sus ventas podrían ayudar a reconstruir las ganancias de la empresa, que está mostrando signos de haber tocado fondo.
“El S6 es un producto que puede causar una fuerte impresión», ha dicho el presidente de Samsung, Shin Jong-Kyun, que también es el encargado del negocio de teléfonos inteligentes de la compañía.
El modelo anterior de Galaxy, el S5, que salió en abril de 2014, fue impopular y calificado por sus propios colaboradores de rancio. Con los clientes no les fue mejor. Las pobres ventas del S5 pesaron en la cuota de mercado de Samsung que colisionó en el segmento alto con Apple y en el extremo inferior económico con los fabricantes chinos.
Esto ha llevado a Samsung a cambiar las características del diseño en esta última versión de Galaxy. El S6 tiene 6.8mm de espesor, casi un 20% más delgado que el S5. Esto obligó a Samsung para sellar el teléfono a diferencia de los diseños anteriores permite sacar la batería. El nuevo modelo tiene una pantalla curva con un marco de aluminio y vidrio templado que le da un color brillante y alta resistencia.
El S6 ha recibido comentarios favorables antes de su divulgación, aunque muchos señalan que el mercado de los smartphones de lujo está saturado. Su enemigo directo es el iPhone 6, con una pantalla más grande, ha sido un éxito.
El S6 se vende en Corea del Sur al precio considerablemente caro de 785 dólares. (International Press)
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