Más de 3 años después del accidente nuclear, siguen evacuados
Un grupo de evacuados por el accidente nuclear de la central nuclear de Fukushima presentaron el viernes una denuncia contra la operadora de la planta, Tepco, en la que reclaman una compensación de 6.000 millones de yenes (41 millones de euros).
La demanda conjunta, firmada por 344 denunciantes que llevan más de tres años evacuados debido al accidente, es una de las mayores hasta ahora presentadas por particulares o grupos afectados por la crisis nuclear provocada por el tsunami y el terremoto del 11 de marzo de 2011.
Los denunciantes, todos ellos residentes de la localidad de Minamisoma, reclaman cada uno 10 millones de yenes (68.000 euros) en daños por el sufrimiento psicológico ocasionado por el accidente y otros 200.000 yenes mensuales (1.360 euros) para todo el período en el que han permanecido evacuados.
Minamisoma fue uno de los municipios incluidos en el área de exclusión debido a los residuos radiactivos emanados del accidente nuclear.
Las autoridades niponas decretaron que los habitantes de esta localidad podían acceder temporalmente a la zona pero no residir en ella.
Los denunciantes han llevado el caso al Tribunal del Distrito de Tokio después de no lograr un acuerdo amistoso con la propietaria de la central, Tokyo Electric Power Company (Tepco), según dijeron sus abogados a la agencia Kyodo.
Este mismo tribunal acumuló un total de 234 denuncias de evacuados de Fukushima entre marzo de 2012 y el mismo mes de 2013, que reclamaban un total de 4.600 millones de yenes (32,2 millones de euros) en compensación por los daños sufridos.
Para hacer frente a los costes de reestructuración y a las numerosas indemnizaciones para compensar daños por el accidente, Tepco ha recibido por parte de un fondo de rescate respaldado por el Estado un total de 3,79 billones de yenes (26.467 millones de euros).
Después del accidente nuclear, 200.000 personas fueron evacuadas de localidades cercanas a la central de Fukushima Daiichi, y de ellas unas 46.000 siguen sin poder volver a sus hogares en un radio de entre 10 y 20 kilómetros alrededor de la planta. (EFE)