Consulta:
«Tengo dolores de cabeza frecuentemente y mis hombros están siempre rígidos desde hace varios años. Fui varias veces al médico, pero me dicen que no tengo nada físicamente y que se debe al estrés. Esta explicación me deja en el aire porque no sé qué hacer para aliviar esto. Querría saber que puedo hacer”.
Respuesta:
Imagino lo que ha sentido al no encontrar ni una salida que alivie sus dolores de cabeza y su ansiedad. Al no encontrarse ninguna causa física se puede inferir que estos síntomas se deben a un estrés crónico.
Debe ser muy duro tener que vivir con esos dolores constantemente. Como primer paso le aconsejaría visitar a un especialista de medicina psicosomática o a un psiquiatra para tener una farmacoterapia que aminore sus síntomas. Esto es un tratamiento sintomático que sería bueno tenerlo a la par de analizar las razones de su estrés.
A continuación veamos desde cuándo tiene estos dolores, trate de recordar que cambios o eventos hubo en su vida por ese tiempo. ¿Es que hubo cambios en su trabajo? ¿Turnos diferentes? ¿Cambió su jefe? ¿O los compañeros? Analice si hay aspectos laborales que lo tienen frecuentemente tenso: ¿Es que siente injusticia en las condiciones? ¿El trato de su jefe deja mucho que desear? ¿Siente que este trabajo no le queda? ¿Las relaciones con sus compañeros no son de lo mejor?
Es fundamental no dejar las cosas con los sentimientos a medias, evadiendo dolores que están flotando en el aire.
Si ha identificado fuentes de tensión vea si puede hacer algo para mejorar la situación, tome tiempo para ver qué acciones serán posibles, incluyendo cambiar de trabajo. Ponga las alternativas en la balanza, si cree que es preferible quedarse, aún cuando sea estresante, el hecho de haber elegido conscientemente después de haber analizado racionalmente la situación, le ayudará a aminorar subjetivamente el estrés que siente.
A continuación, ¿cómo está la perspectiva en su vida personal? ¿Ha vivido una separación y todavía no está convencida de que haya sido la mejor decisión? ¿Es que su hijo no quiere ir a la escuela y la está evadiendo siempre? ¿Es que no se lleva bien con su esposa (o) pero no quiere separarse por los hijos? Los asuntos personales puede que sean más conflictivos, pero analice si hay algo que puede hacer, lo importante es pensarlo bien y estar convencida de la decisión que tome. Es fundamental no dejar las cosas con los sentimientos a medias, evadiendo dolores que están flotando en el aire.
Finalmente, si considera que la fuente de su estrés no puede modificarse, trate de aminorar su estado de tensión a través de ejercicios de relajación, practique yoga, danza u algún deporte de su gusto, charle con sus amigos, o haga cualquier otra actividad que lo relaje. Libérese.
(*) Psicóloga clínica radicada en Japón. Contacte con ella llamando al 090-2245-4021 o por correo electrónico: consultas@hotmail.co.jp