Drogaba a sus víctimas antes de quitarles sus objetos de valor
Ikki Jin, una mujer de 30 años, fue arrestada por la policía de Tokio el 7 de julio pasado. ¿Su delito? Verter un somnífero en la bebida de un hombre de 23 años y robarle 350.000 yenes (3.400 dólares) en efectivo y objetos de valor.
La mujer era buscada desde abril. La policía cree que la ladrona, que solía presentarse como una actriz de voz llamada Aiko, ha drogado y robado a más de diez hombres en los últimos dos años.
El caso ha tomado un nuevo giro al revelarse, a través de la revista Weekly Playboy, que Jin al parecer buscaba dinero para una operación de cambio de sexo.
La mujer sufre de trastorno de identidad de género y vive como un hombre desde que llegó a Tokio en 2007. Frecuentaba bares gay en Shinjuku y, de acuerdo con el testimonio del gerente de uno de los establecimientos, Jin “biológicamente es una mujer, pero se considera hombre. Ella lleva ropa de hombre, se corta el pelo corto y se refiere a sí misma como ‘ore’ (pronombre masculino).»
Otro conocido de Jin, también gerente de un local al que solía acudir, contó que hace unos años ella se sometió a una operación para reducirse los pechos que no funcionó porque el hospital era un desastre y que quería operarse para modificar su sexo, pero no tenía el dinero suficiente.
Asimismo, dijo que a ella le gustaba emborracharse y bromear sobre cosas como orinar al aire libre, según la revista, cuya versión recoge el sitio web The Tokyo Reporter.
El empleado de otro bar reveló que muchas mujeres viajan a Tailandia para someterse a una operación de cambio de sexo que les cuesta alrededor de 2 millones de yenes (19.400 dólares) y que las hormonas masculinas acarrean gastos de unos 10.000 yenes (97 dólares) al mes. (International Press)
