Altas dosis de radiación aumentan el riesgo de cáncer
Un grupo de expertos sanitarios del Ejecutivo nipón ha recomendado hacer controles médicos de por vida a los 20.000 trabajadores empleados para contener la crisis nuclear de Fukushima durante su primera fase, y que pudieron resultar expuestos a altas dosis de radiación.
La iniciativa ha sido propuesta por un panel de expertos del Ministerio de Sanidad con objeto de vigilar la salud de los profesionales que participaron en dichas tareas y comprobar si padecen cáncer u otras enfermedades relacionadas con la radiación, según recoge hoy la agencia Kyodo.
Las primeras revisiones se harán a los 2.000 trabajadores empleados en las «operaciones de emergencia» realizadas en la central de Fukushima Daiichi entre marzo de 2011 y diciembre de 2012, dijeron fuentes gubernamentales a la citada agencia.
Durante esta primera etapa, las tareas se centraron en controlar la fusión nuclear causada por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo de 2011.
El Gobierno decidió entonces elevar el tope de radiación máxima para los trabajadores en la accidentada planta a 250 milisieverts, más del doble de los 100 miliserviets anuales considerados seguros, tras asumir que la situación de emergencia no se prolongaría mucho.
Como resultado, unos 170 trabajadores fueron expuestos a dosis de radiación que aumentan el riesgo de cáncer, según datos del Ejecutivo nipón.
El director del panel de expertos, Toshiteru Okubo, señaló que las revisiones permitirán recopilar datos «de relevancia internacional» sobre el impacto de las radiaciones sobre la salud humana.
También señaló que la información recogida servirá de «orientación» para los residentes de las zonas afectadas por el accidente en la prefectura de Fukushima, en declaraciones recogidas por la televisión estatal NHK.
La compañía operadora de la central de Fukushima Daiichi, Tokio Electric Power (TEPCO), ya sometió a revisión médica a unos 800 técnicos de la planta en mayo de 2011, casi dos meses después de que se originara la crisis nuclear.
El grupo de expertos presentará sus propuestas definitivas durante este mes, con vistas a que el Ministerio nipón comience a efectuar controles médicos a los trabajadores durante el segundo semestre del año. (EFE)