Víctima lo había denunciado ante la policía
Otra víctima mortal más del acoso en Japón. El viernes, una mujer de 38 años fue hallada tirada en una calle en Osaka con un cuchillo perforándole el estómago.
La policía atrapó ese mismo día a un hombre de 57 años que había huido de la escena del crimen.
Alrededor de las 2:30 a. m., un vecino escuchó que un hombre y una mujer peleaban en la calle. Luego, halló el cuerpo de ella entre unos arbustos. La víctima había sido apuñalada en el cuello, el estómago y otras partes del cuerpo. La policía cree que fue atacada mientras volvía a su casa.
Hubo testigos que vieron un automóvil blanco alejándose del sitio a toda velocidad. Alrededor de las 6:15 a. m., la policía encontró el vehículo en el estacionamiento de una tienda de conveniencia, a aproximadamente 1,2 km de la escena del crimen. Abordado por la policía, el chofer dio a entender que había apuñalado a la mujer.
El sujeto no era desconocido para la policía, que tenía conocimiento de que acosaba a la mujer, identificada como Yumi Imura.
En marzo pasado, Imura acudió a la policía para reportar que había recibido un mensaje de texto amenazante del hombre.
El sujeto conoció a Imura en agosto del año pasado, cuando fue a cenar al restaurante en el que ella trabajaba. El tipo se enamoró de la mujer y comenzó a acecharla. En febrero de este año, el dueño del restaurante le dijo que no fuera al negocio nunca más. Sin embargo, el hombre no dejó de acosar a Imura, a quien llamaba por teléfono o mandaba mensajes de texto.
El 1 de marzo, Imura recibió un mensaje que decía: «Deberías contactarte con la policía antes de que te mate». Al día siguiente, ella le hizo caso.
El acosador recibió una advertencia de la policía: deja en paz a Imura. El aviso surtió efecto por cierto tiempo. El 2 de abril, la policía llamó a la mujer para saber cómo estaba. Ella les dijo que el hombre ya no la acosaba. Un mes después la mató. (ipcdigital)