El café ha desplazado al té verde como la bebida caliente más consumida en el país asiático
Hace poco más de un año, la cadena de tiendas de conveniencia 7-Eleven instaló máquinas expendedoras de café en 16.000 locales. La iniciativa fue un acierto. Desde entonces, ha vendido 500 millones de tazas.
El éxito del café, que solo cuesta 100 yenes (0,96 dólares), ha contribuido a levantar las ventas de la compañía, cuyo beneficio neto se incrementó un 27 % a 176 mil millones de dólares para el año fiscal que culminó en febrero, revela The Wall Street Journal.
Cada tienda vende una media de 100 tazas.
Hideki Hashio, un hombre de 39 años que trabaja en servicios financieros en Tokio, consume todos los días el café de 7-Eleven y destaca su equilibrio entre precio y calidad. Es mejor que Starbucks, asegura.
Starbucks aterrizó en Japón en 1996 con un café de mejor calidad (sobre todo si se le compara con el que se vende en las máquinas expendedoras en las estaciones de tren). Sin embargo, el mercado para un café de 4 dólares, cantidad que puede alcanzar para comprar un almuerzo, es limitado, según el diario estadounidense.
El café ha desplazado al té verde como la bebida caliente de mayor demanda en Japón. Entre 1990 y 2012, el consumo de café creció un 50 % a 256.930 toneladas, casi triplicando el de té verde, cuya demanda, en el mismo periodo, cayó un 3 %. (International Press)