Unos 200 aficionados recibieron hoy al delantero uruguayo Diego Forlán a su llegada a Japón, donde aterrizó para incorporarse a las filas del Cerezo Osaka de la primera división nipona por el que fichó el pasado enero.
Portando banderas de Uruguay y enfundados en camisetas de la «celeste» y del Cerezo, los seguidores del equipo nipón dieron la bienvenida con cánticos al astro charrúa en el aeropuerto internacional de Kansai y le ofrecieron una bufanda del club, que Forlán se puso encantado.
Durante la rueda de prensa organizada para su presentación, que retransmitió en directo la televisión japonesa, Forlán sorprendió realizando un pequeño discurso en japonés en el que agradeció la confianza del club y de los aficionados.
El 10 charrúa incluso terminó el pequeño discurso con la expresión «okini», que se emplea para dar las gracias en la región de Kansai, de donde es el Cerezo Osaka.
«Estoy muy contento con el recibimiento de la gente», explicó a continuación Forlán, que empleó el portugués para el resto de la rueda de prensa.
«He estado tres veces en Japón, me gusta mucho el país, y respeto mucho su cultura. Y me gusta el fútbol que se juega aquí, muy técnico y con mucha velocidad», añadió el delantero, que se mostró deseoso de debutar con su nueva escuadra, donde lucirá el 10.
El ariete ha firmado un contrato con el Cerezo hasta diciembre de este año a cambio de unos 600 millones de yenes (5,85 millones de dólares), una cifra récord para la liga japonesa.
El uruguayo es el fichaje de mayor renombre en muchos años para la J.League y Japón será el sexto país en el que juega como profesional tras su paso por Argentina (Independiente), Inglaterra (Manchester United), España (Villarreal y Atlético de Madrid), Italia (Inter) y Brasil (Internacional de Porto Alegre).
La pasada temporada Forlán marcó 22 goles en 55 partidos con el Internacional de Porto Alegre brasileño. (EFE)
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