Se activa el mismo mecanismo cerebral
Rascarse cuando se sufre una picazón produce alivio y algo más. Un estudio del Instituto Nacional de Ciencias Fisiológicas revela que la sensación de bienestar que genera rascarse es la misma que produce estar enamorado, informó Asahi Shimbun.
En ambos casos, se estimula el mismo mecanismo cerebral localizado en el cuerpo estriado y el mesencéfalo (cerebro medio), según los científicos.
El estudio, llevado a cabo por un equipo integrado entre otros por los profesores de neurofisiología Hideki Mochizuki y Rysukue Kakigi, empleó estímulos eléctricos para crear una sensación de picazón en las personas que participaron en la investigación (16 hombres y mujeres) para que luego se rascaran.
Cuando los participantes del estudio se rascaban, se incrementaba el flujo sanguíneo a las regiones conocidas como «sistema de recompensa», relacionadas con el éxito en diversos campos, como triunfar en el amor, ganar una apuesta o conseguir un trabajo.
No obstante, esto no significa que una persona deba rascarse cuando no le pica nada o hacerlo en exceso para sentirse como si estuviera enamorado.