Monto del hurto asciende a diez millones de yenes
Una víctima más de una estafa telefónica en Japón. El 4 de junio, un anciano de 77 años recibió la llamada de un hombre que aseguraba ser uno de sus hijos. El sujeto le dijo que había perdido el dinero de su compañía en una inversión fallida en la bolsa de valores y que necesitaba reponer diez millones de yenes.
Al día siguiente, la víctima, con el dinero en una bolsa, partió desde su casa en Saitama rumbo a Sumida, en Tokio, sitio acordado para el encuentro. Una vez allí, el anciano recibió una llamada de su “hijo”, que le indicó que se dirigiera a la estación de Shin-egota.
El anciano se encaminaba al nuevo lugar cuando, cerca de la estación, un hombre se aproximó por detrás y le arrebató la bolsa, según Mainichi Shimbun.
El ladrón es un hombre joven de un 1,75 m de altura aproximadamente, e iba vestido de negro y usaba una gorra en el momento del asalto.