Cada día la cantidad de agua se incrementa en unas 400 toneladas
El Gobierno nipón ordenó a la empresa operadora de la maltrecha central nuclear de Fukushima que selle el suelo en torno a los edificios de la planta para evitar que aumente la acumulación de agua en los sótanos de estas instalaciones.
El pasado abril los técnicos de Tokyo Electric Power (TEPCO) descubrieron fugas en los tanques subterráneos usados para almacenar el agua contaminada previamente empleada para refrigerar los reactores dañados de la central.
El plan propuesto a la empresa por un comité del Gobierno consiste en «congelar» la tierra del subsuelo alrededor de estos edificios, creando una suerte de muro para contener el agua.
El proceso se realizaría mediante la introducción de unos conductos refrigerantes en el suelo en torno a las edificaciones.
La empresa operadora también debería instalar bombas de extracción en los recintos que acogen los reactores para retirar agua acumulada en los mismos.
La cantidad de agua contaminada en estos edificios se incrementa en unas 400 toneladas diarias debido a la filtración de las aguas subterráneas, lo que hace temer que TEPCO vea desbordada su capacidad para almacenar el líquido contaminado si no se toman medidas drásticas.
Se espera que el plan se incluya en una hoja de ruta, cuya actualización se presentará en junio, para el desmantelamiento de los reactores 1 a 4 de la planta.
El gran volumen de agua radiactiva que TEPCO debe gestionar es uno de los principales retos para los técnicos que trabajan en la maltrecha central nuclear.
El terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011 provocaron en la planta el peor accidente nuclear desde el de Chernóbil en 1986.
Las emisiones radiactivas resultantes mantienen evacuadas a miles de personas que residían en torno a la central y han afectado gravemente a la agricultura, la ganadería y la pesca local. (EFE)