Hemos aprendido del accidente en Fukushima, asegura Abe
Japón se encargará de la construcción de la segunda central nuclear en Turquía, por un valor de 22.000 millones de dólares, según un acuerdo firmado en Ankara por los primeros ministros turco, Recep Tayyip Erdogan, y nipón, Shinzo Abe.
En rueda de prensa, Abe explicó que uno de los tres acuerdos bilaterales suscritos este viernes en materia tecnológica confiere a Japón los derechos exclusivos para negociar la construcción de una planta nuclear en Sinop, en la costa turca del mar Negro.
Según recoge la agencia semipública Anadolu, el acuerdo supone que un consorcio franco-japonés, encabezado por Mitsubishi, se hará con el contrato, valorado en 22.000 millones de dólares.
El plan prevé edificar en Sinop una planta de cuatro reactores del tipo francés Atmea con una capacidad total de 1.100 megavatios.
«Creemos que Japón, tras haber aprendido del grave accidente sufrido, ha hecho sus tareas y cumple con los máximos niveles de seguridad», dijo Abe.
El mandatario japonés aludió así a la planta de Fukushima, que tras el terremoto y tsunami del 11 de marzo de 2011 sufrió el segundo peor accidente nuclear en el mundo y la historia tras el de la central ucraniana de Chernóbil en 1986.
Turquía, un país extremadamente dependiente de la importación de gas natural ruso para sus necesidades energéticas, lleva años apostando por la introducción de la energía nuclear.
El país aún no dispone de ninguna central, pero se prevé que este año empiecen en la costa mediterránea las obras para construir la planta de Akkuyu, adjudicada a la empresa rusa Atomstroyexport.
Varios movimientos ciudadanos y ecologistas se oponen a esta construcción, entre otros motivos porque la provincia de Mersin, donde se ubicará la planta de Akkuyu, está atravesada por una falla geológica, por lo que es proclive a sufrir terremotos. (EFE)