Debió someterse a dos cirugías tras caer en un hoyo en una calle sin iluminación
Un joven brasileño que sufrió graves lesiones mientras manejaba su bicicleta evalúa interponer una demanda contra el gobierno de la ciudad de Ogaki, donde reside.
Paulo Soares, de 23 años, cayó en un agujero que hay en una calle cerca de su casa en la noche del 13 de abril.
El accidente dejó varias heridas en el rostro del brasileño, que debió someterse a dos cirugías.
A Paulo le pusieron 13 puntos en el labio superior y placas de titano en la mandíbula. Asimismo, está utilizando un aparato de ortodoncia.
El joven, que reside desde hace ocho años en Japón, fue dado de alta el sábado pasado, está de licencia médica y aún no sabe cuándo podrá volver a trabajar.
La calle donde se accidentó tiene cinco postes de luz, sin embargo, ninguno proporcionaba iluminación, aseguró. La llanta delantera de su bicicleta se hundió en un hoyo y él cayó al suelo de cabeza.
El gobierno local debería cerrar el agujero e iluminar la calle, declaró Soares.
El año pasado, en Shizuoka, una brasileña tuvo un accidente similar al de él y la justicia determinó que fuera indemnizada.