Exempleador también fue hallado responsable
En 2011, el conductor de una grúa mató a seis niños en la prefectura de Tochigi tras perder el control de su vehículo por un ataque de epilepsia.
Los pequeños fueron embestidos mientras se dirigían a su escuela.
Dos años después, el Tribunal de Distrito de Utsunomiya ha ordenado que la madre y el exempleador del sujeto paguen 125 millones de yenes en compensaciones por daños a los padres de las víctimas, informó Kyodo.
Masato Shibata, el chofer, de 28 años de edad, fue sentenciado a siete años de prisión. El homicida admitió haber ocultado su enfermedad para obtener la licencia de conducir.
La madre fue responsabilizada por no haber impedido que su hijo manejara el día del accidente pese a que sabía que este no había tomado su medicina la noche anterior.
La compañía que lo empleaba también fue declarada responsable por ignorar los síntomas de epilepsia de Shibata y no supervisarlo de manera adecuada.
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