Una manera de ser «contenida, no tan expresiva» vincula a japoneses y chilenos, según realizadora
La cineasta chilena Dominga Sotomayor, cuyos trabajos han sido reconocidos en festivales como el de Sundance (EEUU), ha presentado en Tokio su película «De jueves a domingo», una cinta con «detalles muy chilenos» con la que el público japonés se ha sentido, sin embargo, «muy identificado».
En una entrevista con Efe, Sotomayor consideró «una sorpresa bien bonita» la reacción del público del Festival Internacional de Cine de Tokio, donde su filme fue seleccionado fuera de concurso en la sección «Cine del Mundo» y logró abarrotar la sala en las dos ocasiones en las que se proyectó.
La joven cineasta, de 27 años, cree que «hay algo en la personalidad que vincula» a chilenos y japoneses, una manera de ser «contenida, no tan expresiva» a la hora de comunicarse que comparten ambas culturas.
El primer largometraje de Sotomayor narra la historia de dos hermanos que viajan en coche con sus padres durante unas vacaciones y que, durante el trayecto, se van dando cuenta de que éstos parecen estar a punto de separarse y que éste podría ser el último viaje familiar.
Pese a que el film contiene detalles «muy chilenos», Sotomayor considera que el espacio reducido del coche, a modo de «cápsula», hace que el escenario se pueda identificar con «cualquier lugar» y contribuye a que la historia llegue al público de cualquier país.
La trama nació a partir de fotos de la infancia de la propia directora, principalmente, explica, de una en la que viaja con uno de sus primos en «el techo de un auto», y a ello añadió observaciones personales del mundo que la rodeaba.
Reconoce que uno de los grandes desafíos de «De jueves a domingo» fue trabajar con niños, de los que quería «captar su complejidad» y conseguir que sus actuaciones fueran muy genuinas. «El 80 por ciento de mi energía estaba puesta en ellos», recuerda.
Ahora, Dominga Sotomayor trabaja en su segunda película, «Tarde para morir joven», un proyecto que en el prestigioso festival de Sundance logró un premio que le permite acceder a medios para su realización.
La cineasta espera completar la financiación en 2013 y comenzar a rodar en 2014 en un barrio de las afueras de su Santiago de Chile natal.
Sotomayor aseguró que viajar a la capital nipona era un sueño que tenía desde hacía tiempo. «Incluso una vez dije que iba a hacer una película solo para que pudiera ser seleccionada en un festival en Tokio», concluye entre risas. (EFE)
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