Virtual presidente mexicano es la nueva cara de un viejo partido
El virtual presidente electo de México, el priísta Enrique Peña Nieto, ha sabido aprovechar su tirón mediático y explotar su imagen de político triunfador por encima de tropiezos y críticas, para llegar a la residencia presidencial de Los Pinos.
El resultado electoral preliminar difundido por el Instituto Federal Electoral (IFE) da al candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) entre el 37,93 % y el 38,55 % de los sufragios en los comicios presidenciales celebrados el domingo.
Peña Nieto, que el 20 julio cumplirá 46 años, se ha convertido en la cara nueva de un viejo partido que tras gobernar entre 1929 y 2000 lleva doce años alejado del poder, desde la llegada a la presidencia de Vicente Fox, del Partido Acción Nacional (PAN).
Si en algo coinciden quienes en México opinan sobre Enrique Peña Nieto es en su fuerte perfil mediático, algo que le ha valido el favor de sus simpatizantes, pero también las críticas de sus adversarios.
La posible vuelta al poder del PRI y la figura de Peña Nieto han sido objeto de numerosas críticas. El movimiento estudiantil Yosoy132 fue el primero que acusó al aspirante de ser un «candidato prefabricado» e «impuesto» por la cadena Televisa.
Su faceta mediática se extiende hasta su hogar: Peña Nieto está casado ahora con la actriz Angélica Rivera, conocida popularmente como «La Gaviota» y famosa por su participación en varias telenovelas locales.
Militante del PRI desde los 18 años y con cargos en la administración pública desde comienzos de este siglo, Peña Nieto lleva años forjando su imagen para llegar a la presidencia.
Una carrera meteórica si se considera que cuando en 2005 fue designado candidato del PRI a gobernador del estado central de México era un gran desconocido y sólo tardó tres años en hacerse notar como futuro aspirante a la presidencia.
En esa campaña, «la estrategia fue vender a un rockstar: apuesto, joven, alegre, cálido, con muy buenas formas», recuerda uno de los que intervino en ella, Liébano Sáenz, citado por la revista Nexos.
Ya entonces, Peña Nieto comenzó a firmar documentos ante notario en los que plasmaba sus promesas políticas, algo que ha repetido centenares de veces en la actual campaña a la presidencia.
Su mentor político en esa primera etapa fue Arturo Montiel, un tío lejano y gobernador del estado central de México desde 1999 hasta 2005, cuya gestión estuvo marcada por denuncias de corrupción.
«Peña Nieto ha sido un político frío en todo, salvo en su fidelidad por Montiel, el hombre que lo impulsó para dar en 2005 el salto que lo tiene hoy en la antesala de la presidencia», sostiene el escritor Carlos Tello.
Desde que se convirtió en el único aspirante del PRI a la Presidencia, el 23 de noviembre del 2011, Peña Nieto ha intentado conciliar su perfil de estadista con una vida privada polémica y algún que otro desliz mediático.
Quedó en evidencia cuando, en una rueda de prensa durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara sólo pudo recordar el título de una obra, la Biblia, al mencionar los libros que más le habían impactado en su vida.
Ese desliz desató una oleada de burlas sobre su preparación, a pesar de contar con una licenciatura en Derecho y una maestría en Administración de Empresas.
En una entrevista previa, había dudado al recordar las causas de la muerte de su esposa Mónica Pretelini, ocurrida el 11 de enero de 2007, y desde que entró de lleno en la carrera hacia la Presidencia se han ventilado públicamente sus amoríos.
Tanto que desde febrero pasado uno de los libros que más ventas tiene es «Las mujeres de Peña Nieto», escrito por Alberto Tavira y que lo describe como un «seductor nato» y revisa los hijos que ha tenido fuera del matrimonio.
Peña Nieto, siempre bien peinado y con su flequillo alzado característico, recoge en su biografía oficial los cargos que ha tenido desde el año 2000, empezando por el de secretario de Administración del Gobierno del Estado de México, con Montiel.
Elegido diputado en 2003 por el distrito de Atlacomulco, su cuna, la de Montiel y de otros políticos mexicanos, el 15 de septiembre de 2005 se convirtió en gobernador del Estado de México.
No está muy claro si su imagen de seductor es un perjuicio o una ventaja que ha querido explotar para ganar el voto femenino, teniendo en cuenta que uno de sus principales rivales ha sido una mujer, Josefina Vázquez Mota, candidata del gobernante PAN.
«De ninguna manera (soy un seductor), me asumo como un hombre de familia, dedicado a mi familia», sostiene. (EFE)
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.