El gobierno japonés está considerando imponer una nueva obligación que requerirá a los extranjeros reportar la adquisición de bienes inmuebles en el país, incluso si la compra es para fines de residencia y no solo de inversión. Esta medida forma parte de los esfuerzos para revisar la política de extranjeros.
Actualmente, la Ley de Divisas y Comercio Exterior obliga a las personas o corporaciones con residencia u oficina en el extranjero a informar al Ministro de Finanzas, a través del Banco de Japón, la compra de bienes inmuebles en Japón si la transacción tiene un propósito de inversión. Este informe debe presentarse dentro de los 20 días posteriores a la adquisición.
Sin embargo, hasta ahora no existe obligación de informar si la compra se realiza con fines de residencia.
TRANSPARENCIA Y SEGURIDAD
Según fuentes gubernamentales, se busca hacer obligatorio el reporte de propiedades adquiridas con fines residenciales. La medida tiene varios objetivos clave para aumentar la transparencia en el flujo de capital y prevenir el fraude en la compra de propiedades con fines de inversión que se ocultan bajo la excusa de ser para residencia.
Se espera que esta obligación sea incorporada en las directrices básicas de la política de extranjeros, cuyo borrador final está programado para ser completado en enero del próximo año. (RI/AG/IP/)
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