La policía de la prefectura de Chiba amplió la detención de Asaka Mami, de 32 años, residente en Inage-ku, por el presunto asesinato de su novio, un estudiante extranjero de nacionalidad nepalí. La mujer niega los cargos y sostiene que se trata de “un error”, pese a la contundencia de las pruebas reunidas por las autoridades.
Según la investigación, el crimen ocurrió la mañana del 5 de octubre en un hotel de la ciudad de Funabashi. Asaka es sospechosa de haber apuñalado varias veces en el pecho con un cuchillo a Chhantar Badal, un estudiante nepalés de 21 años residente en Narashino. A las 8:05 horas, la propia Asaka llamó al número de emergencias 119 diciendo que “un hombre de 21 años no respiraba y tenía una herida en el pecho provocada por sí mismo”.
Los equipos de rescate hallaron a Badal tendido boca abajo cerca de la entrada de la habitación. Fue declarado muerto en el lugar. En la escena se encontraron dos cuchillos, y el análisis forense confirmó que las heridas eran compatibles con una agresión intencional.
Horas después del hallazgo, la policía descubrió que la mujer había robado los cuchillos empleados en el crimen en una tienda de artículos domésticos en Inage-ku, en la ciudad de Chiba. La mujer fue detenida, en principio, bajo sospecha de hurto.
Durante los interrogatorios, Asaka admitió haber robado las armas blancas y dio a entender que se trataba de un suicidio: “Quería morir junto con mi novio. Pensé que, si íbamos a morir, no importaba robar”. Sin embargo, la evolución de la investigación, junto con los resultados de la autopsia y las pruebas encontradas en la habitación del hotel, llevaron a las autoridades a reclasificar el caso como asesinato intencional. (RI/AG/IP/)
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