
Una serie de bulos e información falsa sobre la población extranjera y las políticas públicas se ha propagado de manera viral en las redes sociales de la Prefectura de Fukuoka, obligando a las autoridades a desmentir categóricamente los hechos. El último incidente se centró en una afirmación errónea que aseguraba que la ciudad de Fukuoka planeaba contratar a 800 ciudadanos de la República Popular China como funcionarios públicos.
El alarmante mensaje, publicado en redes sociales el 29 de septiembre, preguntaba a los residentes: «¿Saben que el alcalde de Fukuoka, Takashima, va a contratar a 800 personas de la República Popular China como funcionarios públicos!?».
La publicación causó una inmediata reacción de indignación: «¿Contratar a 800 chinos? Es un gran problema», «¡Despidan al alcalde de Fukuoka!» y «¡Difundan esto urgentemente!».
A raíz de la publicación, la ciudad de Fukuoka recibió más de 50 consultas telefónicas de ciudadanos preocupados.
LA VERDAD DETRÁS DE UN RUMOR ANTIGUO
La información que se difundió como «urgente» resultó ser un plan de 2012 que fue cancelado porque se malinterpretó, de la misma manera como ha pasado el mes pasado con un plan de JICA para capacitar funcionarios africanos.
En 2012, la ciudad de Fukuoka había anunciado un plan para recibir a 800 funcionarios chinos con el objetivo de brindarles capacitación en áreas como el tratamiento de residuos y técnicas de conservación de agua. Sin embargo, la escalada de la tensión en las relaciones entre China y Japón a causa de las Islas Senkaku llevó a la suspensión inmediata de aquel proyecto.
El alcalde de Fukuoka, Soichiro Takashima, había lamentado entonces que las tensas relaciones diplomáticas impidieran el intercambio. Trece años después, esta información desactualizada fue sacada de contexto y publicada en las redes sociales.
Funcionarios de la ciudad de Fukuoka confirmaron que cuando responden a las llamadas diciendo «es totalmente infundado» (jijitsu mukon desu), las personas que llaman aceptan la explicación y cuelgan.
UNA CADENA DE DESINFORMACIÓN
El reciente incidente en Fukuoka no es un caso aislado, sino que se enmarca en una preocupante cadena de desinformación de carácter xenófobo en la prefectura:
- Ciudad de Asakura: Se difundió el rumor de que el plan de construcción de un complejo de apartamentos para extranjeros implicaba la «reubicación de 20.000 chinos» y que la prefectura había «dado permiso para la construcción». La Prefectura de Fukuoka se vio obligada a celebrar una rueda de prensa de emergencia para negar los hechos, confirmando: «No existe el hecho de haber concedido permiso».
- Ciudad de Kitakyushu: Tras empezar a ofrecer comidas escolares libres de alérgenos comunes como trigo o soja para niños con sensibilidades alimentarias, se propagó el rumor de que la ciudad estaba implementando «comidas escolares adaptadas a musulmanes». El alcalde también tuvo que convocar una conferencia de prensa para desmentir esta afirmación.
La recurrencia de estos bulos demuestra el peligro de la desinformación en línea, especialmente aquella que busca alimentar el resentimiento contra la población extranjera. Su aparición y expansión en las redes ha sido sorprendente y al mismo tiempo sospechosa porque ocurre en pleno cambio de primer ministro en Japón y cuando el partido ultraderechista Sanseito ha relanzado su política de «Japoneses Primero». (RI/AG/IP/)
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.