La administración de Donald Trump anunció ayer que restablecerá temporalmente las visas estudiantiles de varios cientos de estudiantes extranjeros cuya validez había sido anulada previamente. Esta medida es provisional, a la espera de la implementación de una nueva política que podría proporcionar un marco legal para resolver su situación migratoria en el futuro.
La decisión fue anunciada en el marco de un proceso judicial en el tribunal federal de Boston, donde se revisaba una demanda interpuesta por un estudiante afectado. El caso, que cuestiona las políticas migratorias estrictas implementadas por el gobierno de Trump, pone en evidencia las consecuencias legales de las medidas adoptadas.
La controversia surgió cuando los registros de miles de estudiantes fueron eliminados del Student and Exchange Visitor Information System (SEVIS), la base de datos administrada por la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), que gestiona más de 1,1 millones de visas de estudiantes extranjeros en Estados Unidos. La eliminación de dichos registros resultó en la cancelación de su estatus legal, exponiendo a los afectados al riesgo de deportación.
Según la Asociación de Abogados de Inmigración de Estados Unidos, desde el inicio de la presidencia de Trump, más de 4.700 estudiantes han visto cómo sus datos fueron eliminados de este sistema. En algunos casos, más de 200 estudiantes han logrado obtener una orden judicial que suspende temporalmente las medidas adoptadas por la administración, lo que les ha otorgado un respiro.
Esta acción se enmarca en las políticas migratorias de la administración Trump, que ha adoptado medidas estrictas para controlar el flujo de inmigrantes. (International Press)
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