Lima acogerá este viernes la primera reunión entre el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, y el presidente chino, Xi Jinping, en el marco de la cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). Este encuentro busca reforzar el diálogo de alto nivel y abordar temas clave en las relaciones entre ambos países, en un contexto de tensión geopolítica en la región de Asia-Pacífico.
Se espera que ambos líderes hablen sobre la construcción de una relación de beneficio mutuo basada en intereses estratégicos compartidos, especialmente en el ámbito económico. Este enfoque, que ha sido un pilar de la política diplomática entre Japón y China desde que fuera propuesto por el entonces primer ministro Shinzo Abe en 2006 y formalizado en una declaración conjunta en 2008, fue revitalizado en 2023 durante una cumbre entre Xi y el ex primer ministro Fumio Kishida, en la que se comprometieron a inaugurar una nueva era de cooperación y a evitar conflictos.
AGENDA DE LA CUMBRE
Uno de los puntos principales que Ishiba planea abordar es la reanudación de las importaciones chinas de productos pesqueros japoneses, suspendidas desde el verano de 2023 tras el inicio de la liberación controlada de aguas tratadas de Fukushima al océano. Aunque China participó en un análisis del agua llevado a cabo por la Agencia Internacional de Energía Atómica en septiembre, las restricciones continúan. Ishiba espera que esta reunión contribuya a una reactivación gradual de estas exportaciones.
Otro tema en la agenda es la actividad militar china en torno a Japón. En agosto, un avión de inteligencia militar chino violó el espacio aéreo japonés, un incidente que ha suscitado preocupación en Tokio. Ishiba intentará persuadir a Xi de la importancia de respetar la estabilidad en el mar de China Oriental y el mar de China Meridional, abogando por la no alteración unilateral del statu quo en estas zonas estratégicas.
Ishiba también planea expresar su preocupación por el supuesto despliegue de soldados norcoreanos en Rusia, un tema delicado debido a sus implicaciones en la seguridad regional. Asimismo, el primer ministro japonés buscará abordar la seguridad de los ciudadanos japoneses en China, en particular después de un trágico incidente en Shenzhen en septiembre, en el que un menor japonés fue asesinado, así como la detención de ciudadanos japoneses en territorio chino. Se espera que Ishiba solicite un compromiso firme de China para proteger a los ciudadanos extranjeros y la liberación inmediata de los japoneses retenidos.
VIENE UNA REUNIÓN TRILATERAL
Se está organizando una cumbre trilateral entre Japón, China y Corea del Sur para el próximo año en Japón, lo que podría traer consigo una visita del primer ministro chino, Li Qiang, en lo que sería el primer viaje de un líder chino al país nipón desde 2018. Este tipo de reuniones multilaterales tiene como objetivo promover la cooperación y la estabilidad en el este de Asia, un aspecto crucial para la política exterior de Japón.
El próximo encuentro entre Ishiba y Xi representa una oportunidad para restablecer una relación constructiva entre Japón y China. En un momento de crecientes tensiones en Asia-Pacífico, ambos países parecen decididos a mantener un equilibrio entre la cooperación económica y la defensa de sus respectivos intereses estratégicos. (RI/NI/IP/)