La tensión en Oriente Medio alcanzó un nuevo punto crítico tras el lanzamiento masivo de misiles por parte de Irán contra Israel. En la noche del martes, Teherán disparó 181 proyectiles, provocando que millones de personas en Israel se refugiaran en búnkeres mientras las explosiones se oían en los cielos de gran parte del país. Sin embargo, la mayoría de los misiles fueron interceptados por las defensas aéreas israelíes y estadounidenses, evitando mayores daños.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, calificó el ataque como un «grave error» por parte de Irán y advirtió que «pagarán por ello». Según las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), lograron interceptar una «gran cantidad» de los misiles, lo que evitó un mayor impacto en infraestructuras clave.
En el ataque, un palestino en Cisjordania perdió la vida y dos israelíes resultaron heridos debido a escombros que cayeron tras la interceptación de los misiles. Uno de los proyectiles alcanzó una escuela en Gadera, en el centro de Israel, causando daños significativos al edificio, aunque no se registraron víctimas.
RAW FOOTAGE: Watch as Iranian missiles rain over the Old City in Jerusalem, a holy site for Muslims, Christians and Jews.
This is the target of the Iranian regime: everyone. pic.twitter.com/rIqUZWN3zy
— Israel Defense Forces (@IDF) October 1, 2024
Israel contó con la cooperación de Estados Unidos y Jordania para interceptar los misiles. El sistema de defensa aéreo operó de manera efectiva, y no hubo daños significativos en las capacidades de la Fuerza Aérea de Israel. El general de división Rafi Milo, jefe del Comando del Frente Interno, visitó los sitios afectados y confirmó que el ejército israelí sigue operativo en su totalidad.
En una reunión del gabinete de seguridad israelí, Netanyahu afirmó que Irán no comprende la «determinación» de Israel para defenderse y que «quien nos ataque, será atacado». El primer ministro también agradeció el apoyo de Estados Unidos y pidió a la comunidad internacional que se una contra el régimen de Teherán.
El ataque contra Israel “fracasó”, dijo, y fue “frustrado gracias al sistema de defensa aérea de Israel, que es el más avanzado del mundo”.
Irán afirmó que disparó misiles contra Israel en represalia por los ataques que mataron a líderes de Hezbolá, Hamás y al ejército iraní. Hizo referencia al líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, y al general de la Guardia Revolucionaria Abbas Nilforushan, ambos muertos en un ataque aéreo israelí la semana pasada en Beirut. También mencionó a Ismail Haniyeh, un alto dirigente de Hamás que fue asesinado en Teherán en un presunto ataque israelí en julio.
La Guardia Revolucionaria de Irán dijo que atacaron tres bases militares. Un alto funcionario iraní dijo a Reuters que la orden de lanzar misiles contra Israel había sido dada por el líder supremo del país, el ayatolá Ali Khamenei, quien permanece en un lugar seguro.
Hamás elogió el ataque con misiles de Irán y dijo que fue en venganza por los asesinatos del líder del movimiento, Haniyeh, y del jefe de Hezbolá, Nasrallah.
“El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) bendice los heroicos lanzamientos de cohetes llevados a cabo por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica en Irán contra amplias zonas de nuestras tierras ocupadas”, afirmó un comunicado, añadiendo que fue “en venganza por la sangre de nuestros heroicos mártires”.
Desde Occidente la situación ha generado una fuerte condena internacional, mientras que las fuerzas estadounidenses han reforzado su presencia en la región, enviando más aviones y tropas para apoyar la defensa israelí. A su vez, Irán ha advertido que cualquier intervención estadounidense podría poner en peligro los intereses de Washington en la región. (RI/AG/IP/)