La última edición de la «Encuesta de Sexo Japón 2024», realizada por JEX, la empresa de productos para la salud y preservativos, ha revelado cambios significativos en los hábitos sexuales de los japoneses.
Este estudio, llevado a cabo cada cuatro años, encuestó a 5.029 personas entre 18 y 69 años en las 47 prefecturas de Japón. Los resultados ofrecen un panorama detallado y sorprendente de la vida sexual en Japón.
Uno de los hallazgos más impactantes es la disminución drástica de la actividad sexual, especialmente entre las generaciones mayores. Más del 60% de los encuestados reportan estar en una situación de «sexo sin frecuencia», definida como tener relaciones sexuales menos de una vez al mes. Este fenómeno es aún más pronunciado entre las mujeres, con un 66,8%.
SEXO A LOS 50, EN PELIGRO DE EXTINCIÓN
El análisis por grupos de edad revela que mientras los jóvenes de entre 18 y 29 años no muestran cambios significativos, la caída de las personas que tienen relaciones sexuales es más pronunciada a partir de los 30 años.
En particular, el porcentaje de personas que aún tienen relaciones sexuales en sus 50 años es del 30% entre los hombres y del 10% en las mujeres, mientras quien están en la franja de los 60, el porcentaje es inferior al 20%, lo que convierte a estas personas en una «especie en peligro de extinción».
En 2013, alrededor del 70% de las personas entre 50 y 60 años mantenían relaciones sexuales, lo que significa un cambio drástico en los últimos 10 años.
MUCHO TRABAJO Y POCA ENERGÍA
La encuesta revela diversas razones para este cambio en la frecuencia sexual. Primero, el aumento de parejas en las que ambos cónyuges trabajan. Esta tendencia, que ya era evidente en 2013, se ha intensificado en los últimos años, lo que ha llevado a una mayor carga de trabajo para las mujeres, con menos tiempo y menos energía disponibles para el sexo.
Además, el deseo de tener menos hijos o la preocupación económica también han influido en la disminución del sexo en la pareja. Entre las personas de 50 y 60 años, la menopausia, la disfunción eréctil y la disminución del deseo sexual debido a la caída de hormonas también son factores determinantes.
INFLUENCIA DEL SMARTPHONE
La encuesta también sugiere que la caída de la frecuencia del sexo tiene una posible relación con el aumento del uso de los teléfonos inteligentes, el dispositivo que ha transformado dramáticamente la manera en que las personas interactúan y pasan su tiempo libre.
La pandemia de COVID-19 también ha dejado su huella, acelerando la tendencia hacia una menor intimidad física y un cambio en las prioridades de la vida diaria. En 2020, en plena pandemia, los números ya mostraban una caída en la actividad sexual, que ahora se ha consolidado en los resultados de 2024.
La «Encuesta de Sexo Japón 2024» no solo ofrece una visión de la evolución de los hábitos sexuales en Japón, sino que advierte un futuro con menos actividad sexual. Con nuevas tecnologías y formas de entretenimiento compitiendo por la atención, y un cambio en las prioridades de vida, es probable que más parejas japonesas se «gradúen» de la vida sexual alrededor de los 40 años, marcando una transformación profunda en la cultura del país. (RI/International Press)
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