En Tokio, la Clínica de Enfermedades del Estilo de Vida y Tratamiento de la Obesidad, dirigida por el Dr. Zenji Makita, ha observado un incremento en las consultas de pacientes que se quejan de síntomas como «cansancio sin razón aparente», «fatiga intensa por la tarde» y «somnolencia extrema a pesar de dormir bien».
Según el Dr. Makita, estas molestias pueden estar relacionadas con hábitos alimenticios inapropiados, especialmente el consumo de ciertos tipos de alimentos y bebidas.
El Dr. Makita, reconocido especialista en el campo, advirtió sobre el impacto negativo de los «azúcares líquidos» en la salud. En su libro ‘La mejor dieta para un cuerpo sin fatiga’, Makita describe cómo ciertas bebidas como refrescos, café enlatado (excepto los sin azúcar) y bebidas energéticas, que contienen grandes cantidades de azúcar, pueden ser especialmente perjudiciales.
Incluso jugos de frutas y verduras, a pesar de su publicidad saludable, contienen altos niveles de azúcar que pueden desencadenar lo que él llama «picos de glucosa».
Los picos de glucosa ocurren cuando el nivel de azúcar en la sangre aumenta rápidamente después de consumir alimentos o bebidas azucaradas. Este aumento brusco obliga al páncreas a producir grandes cantidades de insulina para reducir los niveles de azúcar en sangre.
Sin embargo, este proceso puede resultar en una caída abrupta del azúcar en sangre, provocando síntomas como fatiga y náuseas. La repetición frecuente de estos picos puede agotar el páncreas y eventualmente llevar al desarrollo de diabetes.
CUIDADO CON LOS JUGOS DE FRUTAS
Makita enfatizó que evitar los azúcares líquidos es crucial para mantener un cuerpo saludable y libre de fatiga. Las bebidas aparentemente saludables, como los jugos de frutas al 100% y los batidos de vegetales, también pueden contener cantidades significativas de azúcar. Al respecto, citó casos de adolescentes que, tras consumir grandes cantidades de bebidas deportivas, han sufrido episodios de hiperglucemia severa, una condición conocida como «síndrome de la botella».
En este contexto, el Dr. Makita recomienda que las personas opten por agua mineral y tés sin azúcar para hidratarse. El agua, en particular, tiene beneficios comprobados para la salud renal y sugiere consumir al menos 2 litros de agua al día para mantener los riñones funcionando de manera óptima previniendo problemas relacionados con el exceso de azúcar.
Para aquellos que disfrutan de bebidas con gas, Makita aconseja consumir agua carbonatada sin sabor que proporciona la misma sensación refrescante sin los riesgos asociados con el azúcar. Además, advierte sobre el riesgo de caer en la «adicción al azúcar», similar a la adicción a la nicotina, y enfatiza la necesidad de eliminar gradualmente las bebidas azucaradas de la dieta.
Finalmente, el Dr. Makita insta a las personas a ser conscientes de sus elecciones de bebidas y a desarrollar hábitos de hidratación más saludables. Su investigación subraya la importancia de mantener un consumo adecuado de agua para asegurar una función renal adecuada y prevenir la fatiga crónica. (RI/AG/IP/)