El miércoles, alrededor de las 6:30 a. m., una mujer llamó a la policía de Osaka.
“Mi padre dice que mató a mi madre”, dijo.
La policía fue a la vivienda de los padres de la mujer y encontró el cuerpo de la mujer, una persona de 80 años, tirado sobre su cama. Tenía una toalla apretada alrededor de su cuello, según Japan Today.
Su esposo, de 88 años, estaba en el suelo. Sangraba por el cuello y las manos. Cerca de él había un cuchillo manchado de sangre.
Fue trasladado a un hospital, donde el jueves continuaba internado. Su estado es grave.
La policía arrestó al octogenario por asesinato y espera que se recupere para interrogarlo.
El hombre mató a su esposa y luego intentó suicidarse, según la policía.
La hija de ambos no vivía con ellos y había ido a su casa a vistarlos. (International Press)
