La aprobación por parte de Estados Unidos de un paquete de ayuda en armas y logística por 61.000 millones de dólares será una especie de salvavidas para el ejército ucraniano, que se encuentra en una situación difícil, pero es poco probable que pueda cambiar el rumbo de la guerra, dijo un análisis de diario estadounidense Bloomberg.
«Mucho dependerá de la rapidez con la que la ayuda estadounidense llegue al frente después de que la Cámara de Representantes de los EEUU aprobara la ayuda militar y económica el sábado. Con el paquete de ayuda bloqueado en el Congreso durante seis meses, el ejército ucraniano se ha enfrentado a una grave escasez de municiones. y personal, mientras que las fuerzas del Kremlin aprovecharon su ventaja», sostuvo el rotativo.
Mykola Beleskov, investigador del Instituto Nacional de Estudios Estratégicos de Kiev, manifestó que la ayuda estadounidenses permitirá a los militares ucranianos descansar un poco y les ayudará a frenar el avance del Kremlin, llevar a cabo una «defensa eficaz» y minimizar pérdidas. Pero para avanzar, según el experto, se necesita más ayuda.
«La cuestión es si habrá ayuda y en qué medida habrá ayuda a partir de 2025, porque la estrategia de Putin es esperar», declaró Beleskov.
Se espera que el proyecto de ley de ayuda para Ucrania llegue al escritorio del presidente Joe Biden esta semana después de que el Senado lo examine este 23 de abril.
El portavoz del Pentágono, Pat Ryder, dijo la semana pasada que el Departamento de Defensa de Estados Unidos podría comenzar «muy rápidamente» a suministrar armas a Ucrania después de que llegue la ayuda. Hoy se informó que incluso había partido la primera ayuda consistente en municiones con la venia del Senado.
La embajadora de Ucrania en Estados Unidos, Oksana Markarova, dijo que todo este tiempo estuvieron trabajando en la logística del suministro de armas.
«El Pentágono y nuestro Ministerio de Defensa no han dejado de trabajar juntos diariamente en la búsqueda de armas y su identificación, y se están preparando paquetes de ese tipo», afirmó Markarova.
También se informó que algunos equipos, que probablemente incluyan los Sistemas de Misiles Tácticos de Largo Alcance (ATACMS) del Ejército, podrían entregarse a finales de semana.
Al mismo tiempo, los analistas del Instituto para el Estudio de la Guerra creen que incluso si la ayuda estadounidense llega rápidamente, debido a la logística de transporte, «no empezará a afectar la situación en el frente hasta dentro de varias semanas».
«Es probable que la situación en el frente continúe deteriorándose en este momento, especialmente si las fuerzas rusas intensifican sus ataques para aprovechar la ventana limitada antes de la llegada de nueva ayuda de Estados Unidos», dijeron los analistas. (RI/AG/IP/)