Las empresas japonesas con al menos 10 empleados extranjeros deberán nombrar gerentes responsables de garantizar condiciones laborales adecuadas y otros asuntos según las nuevas directrices del Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar Social.
El Ministerio organizará talleres a finales de marzo sobre leyes relevantes, así como consejos sobre comunicación con personal extranjero. Las personas que completen los seminarios de medio día recibirán un certificado.
Se planea realizar más de 30 talleres en siete prefecturas hasta junio, con la posibilidad de ofrecerlos en línea en el año fiscal 2025.
Con el regreso de los trabajadores extranjeros a Japón después del levantamiento de las restricciones fronterizas, ha habido un aumento de los problemas derivados de la mala comprensión de las leyes aplicables y problemas de comunicación.
El Nikkei dijo que muchas empresas hacen trabajar a sus empleados extranjeros de nivel ejecutivo en la parte operativa en sus fábricas o tiendas con el fin de adquirir experiencias, pero no saben que podrían tener problemas legales si su personal con educación universitaria y visa de ingenieros, especialistas y otros son destinados a ciertas tareas en talleres o fábricas.
Los inmigrantes también se han quejado por la falta de información sobre las leyes y costumbres comerciales japonesas. Por ejemplo, los empleados que dejan sus trabajos en otros países a menudo reciben un pago por el tiempo de vacaciones no utilizado, pero esos pagos no son obligatorios en Japón.
La seguridad es otro problema que a menudo resulta de una comunicación insuficiente. Según una encuesta del Ministerio de Trabajo, 2,64 de cada 1.000 trabajadores extranjeros sufren lesiones laborales incluso mortales, en comparación con 2,32 casos del total de trabajadores.
Japón registró más de 2,04 millones de trabajadores extranjeros hasta octubre de 2023, un aumento interanual del 12,4%. Se estima que hasta 2040 llegarán al país unos 6 millones de inmigrantes. (RI/NI/AG/)