En el pueblo de Uchinada, afectado por el terremoto de la península de Noto, se ha reportado una inclinación general de la zona de Nishi-Araya debido a la licuefacción del suelo, mostró un reportaje del fotoperiodista Jun Hori.
La licuefacción del suelo consiste en el desplazamiento (o corrimiento) de terrenos a causa de saturación de agua y particularmente de sedimentos como arena o grava, que pierden su firmeza y fluyen como resultado de fuerzas tan potentes como un terremoto.
En Uchinada, prefectura de Ishikawa, donde se registró una intensidad sísmica de 5, se observaron casas con las bases deformadas, calles onduladas y postes de electricidad inclinados sostenidos precariamente por maderas. Los residentes que se desplazan entre sus hogares y los refugios, muchas veces deben agacharse para los cables que cuelgan al aire libre.
Alrededor de las entradas de las casas se observaron capas de arena blanca emergiendo del suelo entre los fragmentos de concreto partido. Un residente de 60 años dijo que la licuefacción del suelo ha causado que todo en el área de la ciudad se incline, mientras que el pueblo, ubicado cerca del ‘Proyecto de desecación de Kahokugata’, sufre ahora por el ablandamiento del suelo.
VIDEO DE UCHINADA
Según el Municipio de Uchinada, hay registros de licuefacción de hace 230 años, cuando el pueblo sufrió por el impacto del terremoto de Kanazawa en 1799.
En 2013, tras lo observado en el Gran Terremoto de Tohoku, el pueblo creó su «Mapa de la Licuefacción». La línea a lo largo de la Carretera Prefectura Nº8 fue marcada en el mapa como una zona de alta probabilidad de este fenómeno.
El 1 de enero ocurrió lo temido. Los daños por la licuefacción se extienden justo allí, una zona donde viven muchos ancianos, los mismos que podrían migrar de Uchinada porque las condiciones del terreno no les permitirá volver a construir casas allí.
Entre tanto, se espera que el gobierno central designe al pueblo como área de «desastre grave» para que cada hogar afectado reciba 3 millones de yenes gracias a la «Ley de Apoyo para la Reconstrucción de Vidas de las Víctimas».
Sin embargo, la obtención de este apoyo requiere rigurosos certificados de daños, un proceso que ha sido largo y complicado en desastres pasados. El primer ministro, Fumio Kishida, ha indicado que la situación de destrucción podría justificar la designación de «desastre grave» la próxima semana.
Las familias de la zona han expresado su esperanza de que la designación incluya a Uchinada, aunque aún falta determinar el daño a la infraestructura causado por el terremoto y el número de desaparecidos. (RI/AG/IP/)