Desde las 15:00 horas de este miércoles 3 de enero, aproximadamente 95.000 hogares en 14 ciudades y pueblos sufrieron cortes de agua, informó la Prefectura de Ishikawa.
En la ciudad de Wajima, alrededor de 10.000 hogares están sin agua, así como 4.800 en Suzu y 6.200 en la ciudad de Noto, entre otros miles. En estas áreas, camiones cisterna de las Fuerzas de Autodefensa han sido desplegados, pero el suministro no es suficiente. Según estos tres municipios, han sufrido daños en las tuberías de agua en casi todos sus distritos y aún no hay una previsión clara para su restauración.
«El agua y la comida están a punto de acabarse. Los residentes están empezando a debilitarse. ¿Puede la ciudad asegurar algo por nosotros?», se preguntó un funcionario de Wajima que respondió al diario Mainichi desde una hogar para ancianos.
Según un empleado del Departamento de Salud y Bienestar, la mayoría de las llamadas que reciben es solicitando agua. Los residentes evacuados a una escuela primaria local dijeron: «No tenemos agua, así que estamos sobreviviendo comiendo nieve». En la ciudad, las carreteras están cortadas en todas partes, y la administración municipal se ha visto superada por la crisis. «Es realmente desesperante», afirmó.
ARROZ COCIDO CON OOLONG Y JUGO
Los refugios de bienestar social en la ciudad de Wajima, que albergan a más de 60 ancianos y discapacitados, también están lidiando con la falta de agua.
Un empleado contó que están cocinando arroz con té de oolong y jugo disponibles en la oficina. «La gente de los alrededores trae arroz, pero no podemos comerlo crudo, así que estamos pensando qué hacer para la cena de hoy. También estamos teniendo problemas con los baños totalmente insalubres», lamentó.
NI OPERACIONES NI DIÁLISIS
En el sector salud la falta de agua causa serios estragos. «No podemos realizar operaciones ni diálisis», informó Yoichi Dokura, jefe del Departamento de Apoyo Clínico del Hospital Público General de Noto en la ciudad de Nanao.
Aunque el hospital ha estado recibiendo a los heridos desde justo después del terremoto, el corte de agua ha limitado su capacidad de tratamiento. Aproximadamente 100 pacientes que necesitan diálisis han sido referidos a otras instituciones médicas, pero los pacientes de emergencia que necesitan cirugía también han corrido la misma suerte con todo el riesgo que significa.
AGUA PARA DOS DÍAS
El Hospital General Público de Ushitsu en la ciudad de Noto, ha estado atendiendo a los heridos con un equipo de cinco médicos desde el 1 de enero. Con los pacientes ambulatorios aumentando de 3 a 4 veces de lo normal, el desafío es colosal.
Según Eimei Ueno, uno de los gerentes del hospital, las comidas para unos 60 pacientes hospitalizados se están preparando con agua de botellas de plástico almacenadas, pero solo tienen reservas para dos días más.
«Hemos estado solicitando camiones cisterna al municipio desde el 1 de enero, pero toda el área está sin agua y no pueden tratar al hospital de manera especial’, expresó Ueno con preocupación. (RI/International Press)