El primer ministro japonés, Fumio Kishida, ha decidido reemplazar al secretario jefe del gabinete, Hirokazu Matsuno, acusado de desviar a un fondo secreto más de 10 millones de yenes (70.000 dólares) en ingresos por fiestas de recaudación de fondos organizadas por la facción de su partido, revelaron fuentes citadas por el Nikkei.
Kishida inicialmente defendió a Matsuno, uno de los ministros más influyentes de su gabinete, pero las presiones de la oposición y las críticas generales han aumentado.
Matsuno es un político elegido hasta 2021 ocho veces como secretario general de la facción más grande del Partido Liberal Democrático (PLD), que alguna vez estuvo dirigida por Shinzo Abe, el fallecido ex primer ministro y ahora por Kishida.
Desde que estalló el escándalo de los fondos secretos, que habrían sido usados para sobornos, Matsuno se ha negado repetidamente a explicar las acusaciones en las conferencias de prensa diarias en su calidad de portavoz del gobierno de Kishida.
Respondiendo a preguntas en los comités de presupuesto de las cámaras baja y alta el viernes, Matsuno dijo repetidamente: «Investigaré la conducta de mi organización de recaudación de fondos y responderé en consecuencia».
El viernes, Matsuno insistió en que se quedaría para «cumplir con mi responsabilidad». Kishida también lo apoyó y descartó la posibilidad de despedirlo.
El escándalo ha atrapado también a otros personajes como a Tsuyoshi Takagi, presidente del Comité de Asuntos de la Dieta del PLD y actual secretario general de la facción, Hiroshige Seko, secretario general del PLD en la cámara alta del parlamento, y la ex ministra olímpica y actual senadora, Seiko Hashimoto, que son sospechosos de haber recibido sobornos no declarados de la facción de más de 10 millones de yenes cada uno durante un período de cinco años.
Se espera que Kishida también reemplace a Takagi, mientras el departamento de investigación especial de la Fiscalía del Distrito de Tokio está investigando las acusaciones. (RI/NI/IP/)