La policía de Malasia arrestó a siete ciudadanos japoneses por realizar estafas telefónicas a personas de su país desde un apartamento en Kuala Lumpur.
Alertada por un aviso de la embajada japonesa, la policía allanó la vivienda que utilizaban como base de operaciones, detalla Kyodo.
Además de capturar a los delincuentes, confiscó diversos objetos como teléfonos celulares.
Los hombres, de entre 23 y 41 años, se hacían pasar por empleados de bancos.
Los estafadores les decían a las víctimas que había problemas con sus cuentas bancarias y que tenían que transferir su dinero a otra cuenta que ellos les proporcionaban.
Los siete japoneses permanecerán detenidos mientras las investigaciones continúan.
No es inusual que delincuentes japoneses operen desde otros países de Asia para estafar a personas en Japón.
Este mes, la policía japonesa arrestó a 25 japoneses deportados de Camboya, desde donde perpetraban sus delitos.
Además, la policía de Tailandia detuvo a dos japoneses que operaban desde Bangkok. (International Press)