El Primer Ministro japonés, Fumio Kishida, anunció las líneas básicas de su plan de estímulo económico que incluye beneficios fiscales para fomentar la inversión nacional en áreas como la fabricación de semiconductores y baterías, junto con medidas para impulsar el aumento de los salarios.
Estas medidas consideran subvenciones para las empresas de hasta 500.000 yenes por trabajador para estimular el aumento de salarios y reducir la brecha de ingresos, así como una serie de iniciativas destinadas a fortalecer la inversión en áreas estratégicas como la producción de semiconductores y promover la transformación digital y ecológica.
En una conferencia de prensa, el primer ministro Kishida explicó que las subvenciones de 500.000 yenes por trabajador forman parte de un paquete más amplio de medidas destinadas a abordar la alta inflación y asegurar que los frutos del crecimiento económico se distribuyan de manera adecuada entre la población.
«Después de superar los difíciles tres años de la pandemia, la situación económica está mejorando. Hemos logrado un aumento salarial del 3.58%, una inversión nominal de 100 billones de yenes en instalaciones y estamos avanzando en la reducción de la brecha de oferta y demanda de 50 billones de yenes», destacó el Primer Ministro.
Kishida también subrayó la importancia de impulsar un cambio histórico en la economía japonesa después de décadas de enfoque en la reducción de costos.
LAS 5 CLAVES DE LAS MEDIDAS DE KISHIDA
Kishida explicó los cinco puntos principales del paquete de medidas que está preparado: 1. proteger a las personas del impacto del aumento de los precios; 2. estimular un crecimiento sostenido de los salarios e ingresos; 3. inversión nacional que aumente el potencial económico; 4. reforma social que «convierta el cambio en una fortaleza»; y 5. fortalecimiento de la infraestructura y medidas de seguridad ante los desastres y tranquilidad de la ciudadanía.
Kishida también subrayó la importancia de impulsar un cambio histórico en la economía japonesa después de décadas de enfoque en la reducción de costos. «Hemos reducido la inversión en las personas, los salarios e incluso la inversión en investigación y desarrollo como objetivos de reducción de costos, lo que ha llevado a estancar la inversión y el consumo. Ahora estamos en una posición para superar esta ‘economía fría’ y aprovechar la oportunidad de avanzar hacia una nueva etapa de ‘economía templada’ donde podemos sentir el calor de la economía», afirmó.
El gobierno de Kishida se centrará en un período de transformación de tres años, con un enfoque en reformas integrales en el mercado laboral, el estímulo del consumo con aumentos sostenibles en los salarios, la transformación digital y la transformación verde, así como el fomento de la inversión en el futuro y el apoyo a nuevas empresas a través del metabolismo empresarial.
EN BUSCA DE UNA «ECONOMÍA LLENA DE ENERGÍA»
El Primer Ministro japonés enfatizó también que es crucial tomar medidas de manera enérgica y proporcionar un sentido claro y seguro de dirección hacia una «nueva etapa económica llena de energía». Esto incluirá una variedad de enfoques, como medidas de subsidio y la reducción de impuestos y cargas de seguridad social, para garantizar que la economía japonesa avance hacia un escenario de crecimiento sostenible y se evite una recaída en una «economía fría».
En cuanto a la posibilidad de disolver la Dieta en octubre y el momento de presentar el proyecto de presupuesto suplementario, el Kishida declaró: «Actualmente, estamos centrados en abordar los desafíos que no podemos posponer, incluyendo la formulación de medidas económicas. Actualmente, no estamos considerando nada más».
las medidas económicas aún están en proceso de formulación y se trabajará en estrecha colaboración con el Partido Liberal Democrático para definir estas medidas en el próximo mes.
El tema del tipo de cambio del yen también se abordó en la conferencia de prensa, y el Primer Ministro enfatizó la importancia de que las tasas de cambio reflejen los fundamentos de la economía y se mantengan estables.
En cuanto a la inclusión del apoyo a la producción de semiconductores en las medidas económicas y el problema de la desigualdad en el pago de primas de seguro por parte de individuos y trabajadores por cuenta propia, el gobernante destacó que las medidas económicas aún están en proceso de formulación y que se trabajará en estrecha colaboración con el Partido Liberal Democrático para definir estas medidas en el próximo mes.
En resumen, el gobierno de Japón bajo el liderazgo del primer ministro Fumio Kishida se está embarcando en un ambicioso programa de medidas económicas diseñado para abordar la alta inflación, promover el crecimiento sostenible y transformar la economía japonesa en una nueva etapa de prosperidad. Las subvenciones de 500.000 yenes por trabajador para fomentar el aumento de salarios son solo una parte de este esfuerzo integral para revitalizar la economía del país. (RI/International Press)