El presidente Volodimir Zelenski dijo que estaba conmocionado por la reacción de la ONU y la Cruz Roja tras de la explosión de la represa de la central eléctrica de Kajovka atribuida a las tropas rusas.
En declaraciones al diario Bild de Alemania, Zelenski dijo: «No hemos recibido ninguna respuesta (a las solicitudes de ayuda de Ucrania). Estoy conmocionado».
Agregó que sí hubo una reacción, pero fue «muy diplomática».
Zelensky enfatizó que, a pesar de que la tragedia ocurrió hace muchas horas, ni la ONU ni la Cruz Roja «no están ahí… deberían ser los primeros en salvar vidas».
«Lo que está sucediendo ahora es una tragedia. Una catástrofe ecológica y una catástrofe humana… Personas, animales han muerto. Desde los techos de las casas inundadas, la gente puede ver pasar a personas que se ahogan. Puedes verlo del otro lado. Es muy difícil rescatar a la gente de la parte ocupada de Kherson. Cuando nuestra gente trata de salvarlos, los ocupantes rusos disparan», se quejó Zelenski.
Al buscar una explosión al ataque contra la represa, el presidente cree que rusos temen que las Fuerzas Armadas ucranianas lancen una contraofensiva en esa dirección y quieren complicar la liberación de los territorios invadidos.
La noche del 6 de junio de 2023, tropas rusas volaron la presa de la central hidroeléctrica de Kajovka, destruyendo la sala de máquinas y la estructura del embalse. La central no se podrá restaurar y su reconstrucción tardaría unos cinco años, según expertos.
Como resultado de la explosión de la represa Kajovka, comenzaron los problemas de suministro de agua en Krivi Rih, Marhanka y Nikopol. El impacto real sobre la región se verá cuando el agua caída desde la represa empieza a bajar de nivel. (RI/AG/International Press)