Una fuerza integrada por milicianos del «Cuerpo de Voluntarios Rusos» y la «Legión Libertad de Rusia» que combaten a favor de Kiev, se atribuyó la incursión más importante en territorio ruso ocurrido en la región de Belgorod, frontera con Ucrania.
El gobernador de Belgorod, Viacheslav Gladkov, dijo en sus redes sociales que ayer 22 de mayo: «un grupo de sabotaje y reconocimiento del ejército ucraniano ha ingresado y ha entrado en combate con el ejército ruso».
Las fuerzas rusas estacionadas en Ucrania han reconocido el ataque en su territorio, aunque un asesor de la oficina presidencial de Ucrania ha negado cualquier implicación, afirmando que están vigilando la situación pero que no están involucrados.
Según informes de la agencia de noticias TASS y medios de comunicación independientes rusos, se ha registrado un bombardeo contra puestos de control fronterizos y viviendas civiles en suelo ruso con el saldo de ocho personas heridas.
También se ha recibido información de que las fuerzas que llevaron a cabo el ataque contra Rusia utilizaron tanques. La región se encuentra en estado de alerta especial, mientras que algunos residentes han sido evacuados.
El portavoz del Kremlin, Dmitro Peskov, dijo que el ataque en la frontera fue informado al presidente Vladimir Putin, y afirmó que esto podría ser un intento de desviar la atención sobre la situación en Bhajmut, al este de Ucrania, y acusó a Ucrania de estar involucrada.
Por otro lado, tanto los grupos de voluntarios que pelean por ucrania, formado por rusos y bielorrusos, han publicado hoy en redes sociales ayer que han «liberado un asentamiento», reconociendo así el ataque en Belgorod.
Entre tanto, según la Fuerza Aérea de Ucrania, el ejército ruso atacó la ciudad de Dnipró en el este de Ucrania con 20 drones y 16 misiles desde la noche del día 21 hasta la mañana del día 22. Sin embargo, las fuerzas ucranianas lograron derribar todos los drones y cuatro misiles. (RI/AG)
