El 5 de marzo de 2011, Yasushi Yamamoto, un hombre de 77 años, fue dado de alta de un hospital en la prefectura de Nagano, donde había estado internado por una enfermedad mental.
Siete horas más tarde, el anciano murió en un apartamento en Tokio.
12 años después, su viuda, Junko Yamamoto, ha sido hallada culpable del asesinato de su esposo.
El martes, el Tribunal de Distrito de Kioto sentenció a 11 años de prisión a la mujer, informó Kyodo.
La mujer de 78 años apelará el fallo.
De acuerdo con el tribunal, la mujer quería deshacerse de su esposo debido a la enfermedad mental que padecía y por el cual fue tratado durante años.
Junko, su hijo Naoki (un exmédico de 45 años) y Yoshikazu Okubo (un médico de 44 años, un allegado a Naoki) se unieron para matar al anciano.
La mujer mintió al hospital de Nagano donde estaba su esposo para conseguir que le dieran de alta. Antes de ello, siguiendo instrucciones de su hijo, se contactó con un crematorio.
Los tres llevaron a la víctima desde el hospital en Nagano hasta el apartamento en Tokio.
Para el tribunal, la muerte del anciano, siete horas después de salir del hospital, no puede atribuirse a causas naturales, concluyendo que fue asesinado. SIn embargo, no se ha podido determinar con exactitud cómo lo mataron.
El mes pasado, el hijo de la mujer fue sentenciado a 13 años de prisión por el crimen. El hombre ha apelado el fallo.
Por otro lado, Naoki y Okubo fueron acusados de asesinar a una mujer de 51 años con esclerosis lateral amiotrófica en su casa de Kioto en 2019.
La mujer les había pedido que la mataran (la eutanasia no es legal en Japón).
El juicio de Naoki y OKubo por este caso aún no se ha llevado a cabo. (International Press)