El misil balístico que Corea del Norte lanzó el 3 de noviembre en respuesta a un ejercicio conjunto entre las fuerzas aéreas de EEUU y Corea del Sur podría haber sido la prueba de un ataque de «pulso electromagnético»↵ (EMP).
Se cree que el lanzamiento del misil balístico intercontinental (ICBM), correspondería a esta prueba. Corea del Norte ha publicado la foto de un proyectil que se asemeja a un Hwasong-15, un tipo de misil balístico intercontinental. Se calcula que llegó a una altitud de unos 2.000 kilómetros y que cayó en el Mar de Japón.
Ese día, el ejército de Corea del Sur dijo quela prueba del nuevo misil balístico intercontinental, que supuso era un Hwasong-17 había fallado.
Un EMP es un arma que crea una explosión nuclear a gran altura que produce poderosas ondas electromagnéticas que destruyen equipos electrónicos en la superficie. Tiene el potencial de paralizar las instalaciones militares terrestres, el transporte y la infraestructura de generación de energía al mismo tiempo.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur anunció que había recuperado restos de un misil balístico de corto alcance lanzado por Corea del Norte el día 2. Las organizaciones relacionadas analizarán los datos y los utilizarán para establecer la tecnología militar de Corea del Norte.
Entre el 4 y el 6 de noviembre, un barco de rescate de la Armada de Corea del Sur utilizó una sonda submarina no tripulada para buscar partes del misil el área.
Entre tanto, el ministro de Unificación de Corea del Sur, Kwon Yong-se, dijo hoy que la séptima prueba nuclear de Corea del Norte podría realizarse en cualquier momento, aunque no hay señales concretas de su inminencia.
La agencia de inteligencia de Corea del Sur había dicho que la prueba podría tener lugar entre el Congreso del Partido Comunista Chino, que ya se realizó en octubre, y las elecciones intermedias de Estados Unidos en noviembre. (AG/NI/)
