La promesa de convertirlas en modelos o figuras de TV es el comienzo de la pesadilla para muchas jóvenes en Japón.
Asediadas por buscadores de “talentos”, las engatusan haciéndolas firmar contratos lesivos para ellas.
Cuando a las víctimas, aún ignorantes de la emboscada en la que han caído, llegan al lugar de filmación, se dan cuenta de que se va a grabar un video pornográfico con ellas como parte de él.
Si se niegan, las amenazan con multas, entre otras cosas.
Las mujeres pueden verse obligadas a renunciar a sus derechos de imagen, con lo cual, los videos en los que aparecen, si se publican en línea, podrían estar en internet para siempre.
La rebaja de la edad legal adulta de 20 a 18 años en el país asiático, en vigor desde el 1 de abril, dificultaría la ayuda a las menores de 20 años que son obligadas a aparecer en videos pornográficos, advierte Jiji Press.
Los buscadores de actrices porno podrían ir a escuelas de secundaria y preparatoria a la caza de chicas apenas cumplieran 18 años, indica la secretaria general de una organización de derechos humanos.
En 2021, Paps, un grupo que apoya a las víctimas, atendió 81 consultas sobre chicas forzadas a incursionar en la pornografía. En 20 de los casos, las jóvenes tenían menos de 20 años. (International Press)
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