Un panel de expertos del gobierno japonés aprobó hoy la pastilla antiviral Molnupiravir de la farmacéutica Merck, convirtiéndose en el primer tratamiento oral contra el COVID en el país. El medicamento ya ha sido autorizado para su uso en los EE. UU., Reino Unido y Filipinas, entre otros.
En comparación con medicamentos como los tratamientos de anticuerpos monoclonales, que se administran por vía intravenosa, el Molnupiravir es más fácil de usar y menos costoso. Junto con las inyecciones de refuerzo, los tratamientos orales se sumarán a la defensa contra la variante Ómicron que se está extendiendo por todo el mundo.
El Nikkei informó que el Molnupiravir se desarrolló originalmente como un tratamiento contra los virus de ARN como la influenza. Actúa impidiendo que el ARN viral se replique, evitando así que los virus aumenten dentro del cuerpo.
Aunque se ha descubierto que esta pastilla es solo moderadamente efectiva contra COVID, porque reduce el riesgo de hospitalización y muerte entre pacientes de alto riesgo en solo un 30%, el gobierno del primer ministro Fumio Kishida ha comprado tratamientos para 1,6 millones de personas.
Urgidos por la aparición del Ómicron en varias prefecturas del país, las autoridades japonesas planean empezar a distribuir el nuevo medicamento este mismo fin de semana. Se calcula que el tratamiento cuesta alrededor de 700 dólares por paciente.
Para que sea eficaz, el fármaco debe administrarse dentro de los cinco días posteriores al inicio de los síntomas. Los pacientes deben tomar cuatro pastillas dos veces al día durante cinco días, según Merck.
Otras compañías también están desarrollando medicamentos orales, como Pfizer y la japonesa Shionogi. No están pensados como sustitutos de las vacunas, pero su uso puede reducir la carga sobre los sistemas médicos cuando los casos aumenten. (AG/RI/)