La automotriz japonesa Toyota Motor anunció hoy la suspensión de operaciones en siete líneas de producción en cinco plantas nacionales en enero de 2022. La adquisición de piezas, como los semiconductores, se ha retrasado, lo que dará lugar a reducir la fabricación de unas 20.000 unidades más.
Aun así, Toyota mantendrá su plan de producción global en 9 millones de vehículos para el año fiscal 2021 que acabará en marzo próximo. El pasado miércoles 15 de diciembre, la compañía había anunciado que la producción en enero sería de 800.000 unidades en todo el mundo.
Toyota suspenderá la producción de los vehículos utilitarios deportivos (SUV) RAV4 y Harrier en la planta de Takaoka, en la ciudad de Toyota, por un total de siete días, incluido el parón de dos días por vacaciones.
También se afectarán dos líneas en la planta de Toyota Auto Body Yoshiwara, también en Toyota, una línea en Inabe, prefectura de Mie, y en Aichi en Fujimatsu Factory en la ciudad de Kariya y dos líneas en Nagakusa Factory en la ciudad de Obu, que tendrán dos días de suspensión.
En diciembre, Toyota espera producir unas 22,000 unidades en sus plantas nacionales debido al estancamiento en la importación de piezas de proveedores en el sudeste asiático. (RI/NI/)
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