Nissan Motor se prepara para reducir el costo de sus vehículos eléctricos con baterías sin cobalto desde mediados de esta década, reveló el diario Nikkei. La automotriz es consciente de la escasez del cobalto y prevé que su precio aumente en proporción directa al incremento de la demanda mundial por los carros eléctricos.
En un primer paso, Nissan dijo que deducirá en aproximadamente 10% la composición de cobalto en la batería del nuevo modelo del coche eléctrico Ariya, que será presentado a finales de este año.
Al desarrollar una batería sin cobalto, la automotriz japonesa espera aumentar aún más la cantidad de níquel y mejorar la calidad del electrodo negativo.
En el futuro, alrededor de 2030, Nissan espera reducir el costo construyendo una batería de EV a menos de 100 dólares por kilovatio/h, desde los 150 dólares actuales.
Entre tanto, la fabricante estadounidense Tesla también se ha propuesto obtener una batería sin cobalto, mientras Panasonic ya ha logrado reducirlo en sus baterías en 5%.
Sin embargo, ya existen baterías sin cobalto. Ha sido reemplazo por fosfato de hierro y litio como material del electrodo positivo, pero en contra pesa que la carga no dura mucho tiempo y solo se pueden utilizar en distancias cortas.
El Nikkei dijo que el cobalto se encuentra en pocos lugares como la República Democrática del Congo, en África, donde la explotación de las minas han sido origen de luchas e inestabilidad política y ha recibido protestas por el uso del trabajo infantil.
Además de otros motivos, la demanda del cobalto es cada vez mayor y sus precios también. En 2020 la libra del material se vendió a 15 dólares y a principios de marzo de este año el precio se acercaba a los 25 dólares, casi un 60% más que a principios de año. (RI/International Press)
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