Una niña de 3 meses murió en la ciudad de Misato, en la prefectura de Saitama, por abandono y graves lesiones causadas por sus padres, Yuki Kanai (29) y Azusa (28), ambos desempleados. Los dos han sido acusados ayer ante el Tribunal de Distrito de Saitama.
Según la fiscalía todo comenzó por los abusos del padre, Yuki, quien le fracturó la mandíbula a la bebé, lo que provocó que no pudiera alimentarse y muriera posteriormente.
La pareja ha sido acusada tanto por el delito de lesión como por abandono de la obligación de protección de la menor.
La fractura de la mandíbula ocurrió a mediados de agosto del año pasado cuando el padre empujó con violencia el biberón en la boca de la criatura. El 11 de septiembre la bebé fue llevada al hospital en lamentable estado de desnutrición y con una costilla rota. Falleció el mismo día por una disfunción sanguínea que le provocó una parada cardíaca.
En 2019 la justicia japonesa también vio un caso similar ocurrido en Sapporo por violencia y abandono del cuidado de una bebé en Sapporo. (International Press)
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