Keisuke Honda es un futbolista de amplio recorrido internacional. Ha jugado mundiales y en ligas de países como Rusia e Italia, y ha defendido la camiseta de la selección de Japón 98 veces. Si algo le sobra es experiencia.
Sin embargo, a los 33 años y con todo su bagaje a cuestas, Honda quedó impresionado por el furor que ha causado su arribo a Botagofo.
«Nunca había visto eso en toda mi vida”, dijo un sorprendido Honda en alusión al multitudinario recibimiento que tuvo en el aeropuerto en Brasil.
El centrocampista japonés reveló que tenía ofertas de Europa y Asia, pero que decidió fichar por el Botafogo por “la pasión de la gente», según Kyodo.
Honda dijo que los torcedores del conjunto brasileño se pusieron en contacto con él a través de las redes sociales. “Nunca había sentido esa emoción. Ellos (los hinchas) estaban muy emocionados», afirmó.
El jugador dijo que volcará toda su experiencia en el equipo. “Estoy seguro de que me quedaré aquí el mayor tiempo posible, por los hinchas de Botafogo», dijo.
“La pasión de la gente me hizo decidir jugar aquí», enfatizó.
Así como las expectativas son grandes, también lo serán las exigencias. Honda sabe que tiene por delante un gran reto.
«Los jugadores japoneses no han tenido éxito en Brasil, así que quiero tener éxito en Botafogo. Por la historia. Ese es el desafío y no es fácil, pero tengo que hacerlo», manifestó.
Honda espera abrir un camino para futuros jugadores japoneses en la liga brasileña.
Por otro lado, contó que está estudiando portugués para comunicarse mejor con sus compañeros de equipo y los hinchas.
El idioma no le es totalmente desconocido, porque ha jugado con muchos brasileños en Japón, Rusia e Italia. Algunas palabras recuerda. (International Press)
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