Estos chocolates que se regalan por obligación (“giri choco”) pueden ser un fastidio. Hasta estresantes. La mujer debe tener cuidado de no dejar a nadie fuera para no herir susceptibilidades. Además, está el asunto no menor del dinero. Aunque obviamente una mujer no gasta tanto en un giri choco como en un chocolate para su novio, igual es un gasto.
El tiempo, sin embargo, no transcurre en vano. Si bien Japón es un país conservador en muchos aspectos, reacio a los cambios, en algunos aspectos sí está cambiando. La costumbre del giri choco poco a poco comienza a ser cosa del pasado.
Cada vez son más las compañías japonesas que la prohíben, revela el sitio SoraNews24.
Incluso una gran parte de los japoneses percibe está práctica como una forma de acoso de poder. Así lo menos lo considera el 35,6 % de japoneses, hombres y mujeres, que trabajan en oficinas, según una encuesta publicada por TV Asahi.
Una compañía decidió prohibir la práctica hace seis años. TV Asahi conversó con su personal y este, de manera unánime, expresó su apoyo a la medida, pues les quita a las mujeres una presión innecesaria y crea un mejor clima de trabajo.
Una empleada lo sintetizó de manera clara: «Antes de la prohibición, teníamos que preocuparnos por cosas como cuánto es apropiado gastar en cada chocolate y dónde dibujamos la línea de a quién damos los chocolates. Por eso es bueno que ya no tengamos esta cultura de dar a la fuerza”. (International Press)
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