Carlos Ghosn negó haber adulterado sus declaraciones de ingresos, según fuentes de la agencia Kyodo.
El destituido presidente de Nissan fue arrestado el lunes pasado en Tokio acusado de omitir la declaración de alrededor de cinco mil millones de yenes (unos 44 millones de dólares) en ingresos durante un periodo de cinco años hasta el año fiscal 2014.
En dicho lustro, el ejecutivo nacido en Brasil percibió casi 10 mil millones de yenes en ingresos.
Greg Kelly, ex director representativo de Nissan, arrestado por participar en la manipulación de las declaraciones, también negó la acusación.
Por otro lado, Nissan está preparando una demanda por daños y perjuicios contra Ghosn por la supuesta malversación de fondos para comprar viviendas en el extranjero para uso personal y otros gastos privados.
Nissan quiere recuperar no solo los recursos que Ghosn habría empleado para adquirir sus casas en cuatro países, sino también los 100.000 dólares de salario anual que su hermana recibía por una asesoría que nunca proporcionó.
Ghosn también habría usado dinero de Nissan para viajes y comidas familiares.
Las irregularidades que se le atribuyen a Ghosn se destaparon por una investigación interna realizada por Nissan a raíz de una delación.
Ghosn y Kelly fueron despedidos durante una reunión de emergencia de la junta de Nissan el jueves. Sin embargo, Renault aún mantiene a Ghosn como presidente y CEO, alegando ausencia de información relacionada con las acusaciones de la fiscalía de Tokio. (International Press)
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