El domingo se reunieron en Pyongyang el líder de Corea del Norte, Kim Jong- un, y el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo.
El alto funcionario estadounidense, atendiendo a un pedido del primer ministro de Japón, Shinzo Abe, planteó el tema de los japoneses secuestrados por Corea del Norte, según una fuente a la que tuvo acceso Asahi Shimbun.
Kim, sin embargo, eludió referirse al asunto.
Pompeo también transmitió a Kim un mensaje de Abe, quien dijo que está preparado para celebrar una cumbre con el líder norcoreano para resolver un tema que para Japón es una prioridad.
Kim no realizó ningún comentario en particular sobre la propuesta de Abe, según la fuente.
El norcoreano mostró la misma actitud pasiva durante una reunión que sostuvo en septiembre con el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, cuando este planteó la posibilidad de una cumbre Japón-Corea del Norte.
Además, el mes pasado, el ministro de Asuntos Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong Ho, le dijo a su colega japonés Taro Kono, durante una breve reunión en Nueva York, donde ambos asistieron a la Asamblea General de la ONU, que Pyongyang no tenía ninguna prisa por concretar una reunión entre Kim y Abe.
El lunes Kono habló por teléfono con Pompeo. El canciller japonés declaró a los medios que el funcionario estadounidense le confirmó que durante su encuentro con Kim puso sobre la mesa el tema de los japoneses secuestrados. Kono, sin embargo, no comentó la reacción de Kim. (International Press)
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