Alrededor de 930.000 personas se unieron a la fuerza laboral en Japón en el primer día del año fiscal 2018, informó la agencia Kyodo.
El Ministerio de Finanzas de Japón, implicado en un escándalo de manipulación de documentos de la sospechosa venta de un terreno estatal a un operador de escuelas relacionado con la esposa del primer ministro Shinzo Abe, organizó una ceremonia para dar la bienvenida a 34 nuevos empleados.
En representación de los recién llegados, Akane Nakamura (23) se comprometió a “trabajar de manera justa e imparcial».
Un alto funcionario del ministerio, Koji Yano, se disculpó con los nuevos trabajadores por la preocupación generada por el escándalo.
Por su parte, Toshiba recibió a más de 200 nuevos empleados después de que en el pasado año fiscal no lo hizo mientras luchaba para recuperarse de un escándalo contable de 2015.
«Una empresa crece, sobre todo en los momentos difíciles», dijo el director general de Toshiba, Nobuaki Kurumatani.
«Estoy decidido a revivir a Toshiba como una compañía global que representa a Japón», subrayó Kurumatani en declaraciones recogidas por Jiji Press.
En la sede central de Toyota, en la prefectura de Aichi, el presidente del gigante automovilístico, Akio Toyoda, dio la bienvenida a los nuevos empleados, a quienes dijo que están viviendo en «una era de cambio».
Para sobrevivir a la intensificación de la competencia para desarrollar vehículos eléctricos y coches autónomos, Toyoda expresó su deseo de convertir a la compañía en un equipo cuyos miembros trabajen en conjunto para forjar un nuevo futuro.
Mientras tanto, el fabricante de productos electrónicos Panasonic llevó a cabo una ceremonia para recibir a sus nuevos empleados en la prefectura de Osaka.
Kazuhiro Tsuga, presidente de Panasonic, compañía que celebró su centenario en marzo del año pasado, dijo a los jóvenes: «Construyamos los nuevos 100 años juntos». (International Press)
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