Sin embargo, la oleada de críticas por el video que fue visto seis millones de veces no se detiene.
El comportamiento de Logan, que banalizó la tragedia con sus bromas y promoviéndola como algo “loco”, es una clara violación de las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre cómo los medios de comunicación deben informar sobre el suicidio, dijo en declaraciones a Japan Times, Jiro Ito, que dirige un grupo de prevención del suicidio juvenil con sede en Tokio.
La OMS pide a los medios que actúen con moderación en su cobertura de los suicidios.
Aunque el youtuber no forma parte de los medios, debería haber actuado con más prudencia considerando su gran influencia en YouTube, dijo Ito, para quien es «totalmente inaceptable” mostrar un suicidio como si fuera un “hecho humorístico».
Logan aseguró que su intención había sido crear conciencia sobre el suicidio y contribuir a la prevención. Ito sostuvo que quien necesita tener mayor conciencia sobre el tema es el mismo youtuber.
Un portavoz de Google enfatizó que el video de Logan viola sus políticas y que YouTube (del cual es propietario) prohíbe “contenido violento o sangriento publicado de manera ofensiva, sensacionalista o irrespetuosa».
Aunque la tasa de suicidio en Japón está en declive desde 2003 y en 2016 descendió a su nivel más bajo en 22 años (21.897), el suicidio es la principal causa de muerte entre las personas de 15 a 39 años. (International Press)
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