El Ministerio de Educación de Japón ha propuesto un conjunto de directrices para el desarrollo de las investigaciones de los casos de ijime que acarrean graves consecuencias para los niños.
La propuesta ha sido incluida en un proyecto sobre asuntos relacionados con la ley de prevención del ijime, informó Jiji Press.
Las graves consecuencias, según la ley, se definen como situaciones en las que los niños podrían estar sufriendo daños que amenacen su vida o severos daños físicos, mentales o materiales, y por los cuales tienen que faltar a clases por un considerable período de tiempo.
Las escuelas y los consejos de educación, por exigencia de la ley, deben llevar a cabo investigaciones rápidas de estos casos con equipos que incluyan la participación de terceros.
Las investigaciones algunas veces son deficientes, pues no reflejan las peticiones de las víctimas y sus padres, o estos no son adecuadamente informados sobre los resultados. (International Press)
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