Asume responsabilidad por haber causado «preocupación y problemas a mucha gente»
El ministro nipón de Deporte, Hakubun Shimomura, presentó hoy su dimisión por el escándalo del estadio olímpico para Tokio 2020, aunque podría permanecer en el cargo hasta la reforma del Gabinete de Gobierno prevista para el próximo mes.
Shimomura ha decidido asumir la responsabilidad por haber causado «preocupación y problemas a mucha gente» a raíz del proyecto de coliseo olímpico desechado, explicó en rueda de prensa el también titular de Educación, Ciencia, Cultura y Tecnología.
El diseño original para el estadio fue descartado el pasado julio por el Gobierno después de que su coste de construcción se disparara hasta casi el doble de lo inicialmente presupuestado, y tras recibir un aluvión de críticas por su magnitud excesiva y a su diseño poco adaptado al entorno.
El jueves, un panel independiente designado por el Ejecutivo señaló al Ministerio de Deportes y al Consejo de Deportes de Japón (JSC), un ente público propietario del recinto olímpico, como responsables de no haber planeado debidamente la construcción del nuevo estadio.
Pese a su dimisión, se espera que Shimomura permanezca en el cargo hasta la primera o la segunda semana de octubre, cuando el primer ministro nipón, Shinzo Abe, prevé anunciar una reforma de su Gabinete, según dijeron fuentes gubernamentales a la agencia local Kyodo.
El director general de Deportes de Japón, Kimito Kubo, también dimitió de su cargo a finales de julio con motivo del escándalo del estadio.
El Gobierno ha abierto una nueva convocatoria para elegir el diseño de la que será la sede principal de Tokio 2020, y prevé que el nuevo estadio comience a construirse a finales de 2016 y se termine para inicios de 2020. (EFE)
