La selección de Japón derrotó 2-1 a la de Camerún en el último partido de la segunda ronda del grupo C que lidera invicto en el Mundial de fútbol femenino de Canadá 2015, donde defiende el título de campeona.
Los goles de Japón llegaron rápidos, al minuto seis por mediación de defensa Aya Sameshima que remató a placer un centro que le pusieron desde la derecha y cruzó todo el área del equipo africano sin que nadie tocase el balón.
El gol cayó como una losa en el ánimo de las jugadoras de Camerún que sin tiempo para reaccionar, 11 más tarde, a los 17 minutos, la delantera Yuika Sugasawa, conseguía el 2-0 con un espectacular remate de cabeza al superar en el salto a la portera de las Leonas, Annette Ngo Ndom.
No se alteró más el marcador y ambos equipos se fueron al descanso ante la felicidad de los seguidores japoneses que se encontraban en las gradas del BC Place Stadium, de Vancouver, escenario donde se disputó el partido.
Japón, que tuvo más control del balón, un 57 por ciento, dejó que el equipo africano pusiese el mayor desgaste físico con disparos permanentes a puerta sin que llevasen ningún peligro, mientras que las campeones del mundo fueron súper eficaces a la hora de rentabilizar los cuatro que hicieron.
El equipo nipón también estuvo seguro en defensa y su portera Ayumi Kaihori hizo de paradas claves que evitaron el gol de Camerún que hubiese cambiado la historia del partido.
La combinación entre la centrocampista Gabrielle Onegune y la delantera Galle Enganamouit fueron las que generaron la oportunidad más clara de gol, pero surgieron los reflejos de Kaihori e impidió que subiese el marcador.
La delantera Ajara Nchout conseguía el del honor de Camerún al minuto 90, pero sin tiempo para reaccionar y lograr el empate que le hubiese dejado a las puertas de la clasificación a los octavos de final.
Aunque Enganamouit a falta de segundos para que se cumpliese el tiempo de descuento hizo que los corazones de los seguidores nipones se paralizasen con un remate de cabeza que mandó el balón a escasos centímetros de la portería defendida por Kaihori, que no hubiese podido hacer nada por evitar el gol.
Luego llegó la celebración de las actuales campeonas del mundo en el centro del campo, mientras que las Leonas se fueron desoladas del terreno de juego y con la presión de jugarse todo en la última jornada del Grupo C que se disputará el próximo martes.
Japón y Ecuador, que ya está eliminado de los octavos de final, jugarán su partido de cierre del Grupo C en el Winnipeg Stadium, de la sede de Winnipeg. (EFE)
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